Crítica sobre posproducción de Miguel Angel Monzó

Miguel nos habla de su obra, la cual toma de referencia al trabajo de Ignacio Iturria, el cual trabaja con el recorte y collage, para luego hacer una edición de la misma para ir construyendo imágenes complejas que tratan de generar, de alguna manera, que el espectador se sienta apelado por lo que presenta y representa. 

Con esto en mente, quien presenta su posproducción, nos trae una obra de collage; esta incluye varias piezas de diferentes tamaños. La primera y más extensa, es un collage el cual cuenta con diferentes materialidades donde se observan, entre ellas: pintura, revistas, pedazos de cartulina, letras, etc. El soporte de esta propuesta nos muestra que no fue previsto el trabajo que fue hecho encima de este; si bien se nota el azar pensado en esta obra, el soporte debería haber sido pensado para soportar la materialidad del trabajo, aún así, considero que la elección de la paleta y la composición son acertadas. También estimo que dicha obra podría haberse lucido de una mejor manera si esta estuviera montada en una pared de mayor altura para que toda esta quedara en la misma posición o por otro lado, que la obra estuviese ligeramente más baja para que su extensión en el piso fuese mayor y nos guiara en ese recorrido de otra manera.

La segunda propuesta cuenta con 4 piezas complementarias dispuestas en dos filas y columnas, formando un cuadrado. La misma cuenta con elementos iconográficos reconocibles del siglo XX, mayormente de la cultura Pop. En mi opinión creo que el montaje es acertado en si mismo aunque en relación a su compañero de gran tamaño, los pondría más alejados para que no se opaquen entre si, ya que si bien vemos un claro collage en ambas, las herramientas gráficas son distintas. 

Por último tenemos dos piezas, realizadas por Miguel, enmarcadas, con un diseño ligeramente más simple que las dos propuestas anteriores. Considero que estas piezas se complementan bien con el resto de la muestras pero nuevamente, las separaría de sus compañeras, tal vez emplazándolas en otra pared cercana.

El artista nos habla que tomando como inspiración a Ignacio Iturria tomando algunas de herramientas de él para realizar su obra. Entre ellas comenta que toma como eje el juego, lo lúdico, que se genera del cortas, pegar, superponer. Esto le brinda a la obra diferentes capas de sentido, tanto en lo iconográfico, como lo gráfico y también apelando a que de manera aleatoria el espectador reconozca algo de la maraña de significaciones que se tejen en su obra, lo que asemeja a la realidad que construimos.